Antes de la visita a la peluquería canina o la veterinaria hay que seguir unos pasos, para una correcta asociación. Entender que cada perro posee su propia personalidad y temores es esencial, similar a las personas. Si notas que tu mascota muestra resistencia hacia visitas a la peluquería canina o al veterinario, aquí te comparto algunos consejos para introducirlo a nuevas experiencias de manera más positiva.
Antes de la visita a la peluquería canina o la veterinaria: Consejos para todo tutor canino
Cuando se trata de llevar a tu peludo amigo a la peluquería canina o al veterinario, es fundamental anticiparse y tomar medidas para garantizar que la experiencia sea lo más positiva posible. Recuerda tu conoces a tu perro mejor que nadie y debes ser el que vigila por que todo se pase bien.
Aquí te ofrecemos algunas pautas esenciales que todo tutor debería seguir antes de programar una visita:
1. Atiende sus necesidades básicas de tu perro antes de la visita a la peluquería canina o la veterinaria.
Atender las necesidades básicas de tu perro antes de dirigirte a la estética canina o al veterinario es esencial para asegurar una experiencia más cómoda y menos estresante para tu mascota. Cuando nos referimos a atender sus necesidades, nos estamos centrando en permitirle hacer sus necesidades fisiológicas, como orinar o defecar, antes de la visita.
Esta precaución tiene un propósito significativo, ya que evita que tu perro retenga la necesidad de orinar durante todo el servicio en la estética canina, especialmente cuando están bañándolo y secándolo. Si tu perro se ve obligado a aguantar durante el proceso, aumenta la posibilidad de que, una vez finalizado el servicio, se sienta aliviado y opte por orinar justo en ese momento.
Proporcionarle la oportunidad de hacer sus necesidades antes de la visita no solo alivia cualquier malestar o ansiedad asociada con la retención, sino que también contribuye a un entorno más relajado durante el servicio, permitiendo que tu mascota se enfoque en la experiencia en sí, en lugar de estar preocupado por sus necesidades fisiológicas. En resumen, atender las necesidades básicas de tu perro antes de la visita a la estética canina o veterinaria es una medida preventiva clave para promover su comodidad y bienestar durante todo el proceso.
2. Recuerda tu perro también tiene necesidad de relajarse antes de ir a la peluquería o el veterinario
Es fundamental reconocer que, al igual que nosotros, los perros también tienen la necesidad de relajarse antes de enfrentarse a la peluquería o al veterinario. No se trata únicamente de permitirles hacer sus necesidades fisiológicas antes de la visita, sino también de proporcionarles un tiempo para calmarse y adaptarse al cambio de entorno.
En muchas ocasiones, los perros pueden experimentar altos niveles de excitación, especialmente si se les lleva directamente de casa a la peluquería o al veterinario sin un período de transición. Esta energía acumulada y las ganas de jugar pueden traducirse en una experiencia más estresante tanto para el perro como para el personal que lo atiende.
Para evitar esta situación, es beneficioso incorporar una fase de relajación antes de la visita. Puedes lograrlo ofreciéndole a tu perro un breve tiempo de tranquilidad en casa antes de salir. Esto podría incluir momentos de mimos, caricias o incluso un paseo relajante para ayudar a disminuir la excitación y permitir que tu mascota se adapte gradualmente al cambio que se avecina.
Este enfoque no solo mejora la experiencia para tu perro, sino que también facilita el trabajo del personal en la peluquería o en el consultorio veterinario al tener a un paciente más tranquilo y receptivo. En resumen, considerar las necesidades emocionales de tu perro y proporcionarle un tiempo para relajarse antes de la visita contribuye significativamente a una experiencia más positiva y menos estresante para todos.
3. Mantén la calma y la seguridad de tu mascota
Tu perro es un experto en leer tu lenguaje corporal. Por lo tanto, evita mostrar nerviosismo y comunícate con él de manera tranquila y serena. Una actitud relajada y segura por parte del tutor ayuda a que el perro se sienta más cómodo y seguro.
Cuando te acercas a la peluquería canina con tu perro, ten en cuenta que los animales, y en este caso los perros, son expertos en percibir las señales emocionales y el lenguaje corporal de sus dueños. Si entras al establecimiento arrastrando al perro con nerviosismo evidente, no solo afecta tu propio estado de ánimo, sino que también puede influir negativamente en la experiencia de tu mascota.
El nerviosismo puede transmitirse a tu perro a través de la correa, las tensiones musculares y tu comportamiento general. Un perro que detecta ansiedad o tensión en su tutor podría interpretarlo como una señal de que hay algo inusual o potencialmente amenazante en el entorno. Esto puede generar estrés adicional en el animal y hacer que se sienta inseguro o aprensivo.
En cambio, mantener una actitud tranquila y serena al entrar a la peluquería canina establece un tono positivo y relajado para tu perro. Un tutor calmado comunica confianza y seguridad, lo cual es fundamental para que tu mascota se sienta a gusto en un entorno que puede resultar desconocido o un poco estresante.
Al adoptar esta actitud, estás contribuyendo a crear un ambiente más positivo y relajado tanto para ti como para tu perro. Esta tranquilidad puede facilitar el trabajo del personal en la peluquería, ya que un perro más calmado tiende a ser más colaborativo y receptivo durante el proceso de cuidado. En resumen, la actitud del tutor desempeña un papel crucial en la comodidad y la seguridad emocional de la mascota durante su visita a la peluquería canina.
4. Refuerza comportamientos positivos en tu perro
En el proceso de preparación en casa y en el trayecto hacia la peluquería, es crucial reconocer y reforzar los comportamientos positivos de tu perro, especialmente considerando que este entorno puede ser desafiante para él. El objetivo es crear asociaciones positivas y fomentar una actitud relajada durante la visita. Aquí hay más detalles sobre cómo lograrlo:
Debes reconocer y premiar comportamientos positivos:
Cuando tu perro exhiba signos de calma, sumisión o cualquier comportamiento positivo, como sentarse tranquilo, mirar relajadamente o responder a tus indicaciones, asegúrate de reconocerlo de manera positiva. Puedes utilizar elogios verbales suaves, caricias o incluso recompensas en forma de golosinas para perros.
Refuerzo positivo de las conductas que quieres repetir:
El refuerzo positivo consiste en premiar un comportamiento deseado para aumentar la probabilidad de que este se repita en el futuro. Al elogiar y premiar a tu perro cuando está calmado, estás reforzando la asociación positiva con la peluquería y el trayecto hacia el lugar.
Evitar reforzar comportamientos nerviosos o nocivos:
Por otro lado, es esencial evitar recompensar comportamientos nerviosos o ansiosos, como temblar, ladrar en exceso o mostrar inquietud. Si bien es natural sentir empatía cuando tu perro está nervioso, premiar este comportamiento podría reforzar la ansiedad en lugar de aliviarla.
Ignorar comportamientos negativos:
En situaciones estresantes, los perros pueden mostrar comportamientos no deseados. Es crucial no darles importancia ni reforzarlos negativamente. Ignorar estos comportamientos ayuda a evitar que el perro asocie la atención con la ansiedad.
Crear una asociación positiva con la peluquería canina:
La meta final es que tu perro asocie la peluquería y el trayecto hacia allí con experiencias positivas. Al premiar los comportamientos calmados y positivos, gradualmente construyes una conexión positiva que hace que tu perro se sienta más cómodo y relajado durante estas actividades.
En resumen, reconocer y premiar los comportamientos positivos, junto con la omisión de los comportamientos nerviosos, contribuye a la creación de una experiencia más positiva y menos estresante para tu perro en la peluquería canina o en el veterinario. Si después de leer este texto aún no lo tienes claro te invito a que hagas un curso básico de educación canina, así podrás entender mejor a tu perro.
5.Familiarízalo con la Manipulación en casa
Deberías establecer una rutina de la manipulación de tu perro, no solo para antes de la visita a la peluquería canina o la veterinaria. También por que necesitarás que otras personas cuiden a tu perro, que otras personas puedan tocarlo,… es algo que servirá para mucho más que la peluquería canina o el veterinario.
El cepillado regular en casano solo contribuye al cuidado del pelaje, sino que también acostumbra a tu perro a la manipulación y al contacto físico. Esta familiaridad previa reduce la ansiedad en la peluquería, donde experimentará manipulaciones similares.
Recuerda la peluquería canina más cerca de ti eres tu mismo. Aprende a cepillarlo bien así cuando lo bañes encasa no le dejarás nudos que después se conviertan en una placa.
6. Establece una Rutina Positiva antes de la visita a la peluquería canina o la veterinaria
Introduce momentos de juego y cariño en la zona donde tu perro será atendido. Esto le ayudará a asociar el lugar con experiencias agradables, haciendo que se sienta más cómodo durante la visita. En mi caso para mis perros después del baño toca juego y les doy una chuche de alto valor. Así asocian la peluquería con las recompensas que vienen al final.
Al seguir estas pautas esenciales, estarás contribuyendo significativamente a una experiencia más positiva para tu perro en la peluquería canina o en el consultorio del veterinario. La preparación y la anticipación son clave para fomentar la confianza y el bienestar de tu querida mascota.
7.- Acuérdate antes de la visita a la peluquería canina o la veterinaria
- Satisfacción de Necesidades: Asegúrate de que tu perro haya hecho sus necesidades previamente. Un paseo antes de la cita le permitirá relajarse, considerando que estará en un entorno que quizás desconoce. Permitirle ir al baño antes de llegar a la peluquería reduce el estrés y aumenta su comodidad.
- Cautela en tu Comportamiento y en el suyo: Evita mostrar nerviosismo y no te comuniques con tu perro como si fuera un niño. Los perros son sensibles al lenguaje corporal, así que respira profundamente, relaja tus brazos si llevas correa y mantén la calma.
- Gestión de Recompensas, hazlo de forma consciente: No recompenses ni mimes a tu perro si lo ves ansioso. Premiar ese comportamiento no es beneficioso. Opta por elogiarlo solo cuando esté relajado y sumiso.
- Cepillado Regular en casa: Acostumbra a tu perro al cepillado en casa para que se familiarice con la manipulación que experimentará en la peluquería canina. Esto reduce la sorpresa y la ansiedad asociada.
Con estos pasos, verás que llevar a tu perro al estilista canino no es algo que deba evitarse. Recuerda antes de la visita a la peluquería canina o la veterinaria, solo se necesita tiempo y paciencia. Con el tiempo, tu mascota aprenderá a disfrutar de los cuidados y mimos. El bienestar canino incluye el cuidado y tratamiento del pelaje según la raza, así como la higiene de oídos, boca y almohadillas.